¿Habían imaginado el iPhone℗ en 1992?
Aunque siempre es justo que una compañía pague si ha violado alguna patente, parece que este no será uno de esos casos. En 1992, Ross entregó una patente a la oficina de patentes de los Estados Unidos, sí, pero su patente fue declarada como abandonada en abril de 2015 porque el autor nunca pagó por ella, es decir, la patente nunca llegó a completarse.
Thomas S. Ross quiere que Apple℗ le pague “no menos de 10.000 millones de dólares” y además quiere un 1.5% de todas las ventas de aparatos que él cree que han violado su diseño. Según el demandante, está sufriendo “unos daños grandes e irreparables que no se pueden compensar o sopesar con dinero“. Teniendo en cuenta que nunca pagó por la patente, sólo diré que le deseo suerte.
El producto Demandan a Apple℗ diciendo que el iPhone℗ estaba patentado en 1992 ha sido originalmente anunciado en Actualidad iPhone.